Nuestros tratamientos de rejuvenecimiento se destacan por su efectividad y personalización para cada cliente, marcando la diferencia en los resultados obtenidos.

Los rellenos faciales ayudan a rellenar y definir áreas del rostro, proporcionando un aspecto más joven y fresco.

Los efectos secundarios son generalmente leves y temporales, como hinchazón, enrojecimiento o pequeños moretones, que desaparecen en pocas horas o días. Sin embargo, en raros casos pueden surgir efectos más graves, como infecciones, afectaciones vasculares o reacciones alérgicas. Por eso, es crucial ponerse en manos de un profesional especializado, que pueda detectar cualquier complicación a tiempo y ofrecer la solución adecuada para minimizar riesgos y asegurar la seguridad del tratamiento.

El tratamiento con neuromoduladores es mínimamente molesto. Se realiza con agujas muy finas y dura solo unos minutos. Además, se puede aplicar anestesia tópica si el paciente lo necesita, aunque en la mayoría de los casos no es necesario. La sensación es similar a pequeños pinchazos y la molestia desaparece rápidamente.

En su mayoría, los tratamientos no requieren tiempo de recuperación. Puedes volver a tus actividades cotidianas inmediatamente, aunque es recomendable evitar ejercicios intensos y exposición al sol durante las primeras 24 horas.

La duración depende del tipo de tratamiento. Por ejemplo, los resultados de la toxina botulínica suelen durar entre 4 y 6 meses, mientras que los rellenos de ácido hialurónico pueden durar entre 12 y 18 meses. Ofrecemos revisiones periódicas para asegurar que los resultados sean siempre los mejores.

No existe una edad específica, ya que depende de las necesidades de cada paciente. Sin embargo, muchos comienzan a partir de los 30-35 años para prevenir signos de envejecimiento. Siempre realizamos un análisis personalizado para recomendarte el mejor enfoque.

Sí, en nuestra práctica nos centramos en lograr resultados naturales y sutiles. La idea es realzar tu belleza sin cambios drásticos, manteniendo la armonía de tus facciones y tu expresión facial.

La mayoría de los tratamientos son rápidos y no requieren mucho tiempo. Por ejemplo, el tratamiento con neuromoduladores puede durar entre 15 y 30 minutos, mientras que los rellenos faciales pueden tomar alrededor de 30 a 45 minutos.